Convivencia "En el muelle" - El Salvador 2018

El 20 y 21 de enero se realizó la convivencia “En el muelle” en la cual los jóvenes que han vivido sus tres años de travesías dentro del movimiento Remar cierran la primera etapa (dejan de ser “carabelas”) e inician un tiempo de preparación y pasaje para tomar la decisión de formar una comunidad Remar. En esta ocasión, participaron los jóvenes de las carabelas Fixus Deus y Edidere Vita, quienes ahora forman las precomunidades del Colegio Champagnat y Liceo Salvadoreño respectivamente.

La convivencia estuvo centrada en recoger y agradecer la experiencia vivida durante esos tres años y proyectar con ilusión el futuro, tomando conciencia de lo que implica ser comunidad cristiana.

Agradecemos profundamente a quienes a lo largo de estos años fueron los timoneles de las carabelas, brindando su tiempo y dedicación. Animamos a los jóvenes a seguir adelante en esta segunda etapa del movimiento que nos invita a crecer como discípulos de Jesús.

Hna. María Laura Soto – Equipo Misión El Salvador

A continuación compartimos el testimonio de dos jóvenes que vivieron esta experiencia: 

“En el Muelle” es una experiencia llena de emociones, pues por un lado, da tristeza el dejar ir a tu carabela, el recordar todo lo vivido, las risas, los buenos momentos, incluso los malos que te hicieron crecer, en donde ahí estábamos como Fixus Deus (nombre de mi ex carabela) esos momentos que no volverán. Por otro lado, da alegría saber que realmente estos 3 años han valido la pena, y sin ellos probablemente no sería la misma persona, porque en realidad te marcan. No obstante, “En el muelle” no es el final, más bien el inicio de un gran viaje, en donde me siento invitada a seguir amando la vida, el buscar y luchar por acercarme más a los demás, a encontrarme a mí misma cada vez en los detalles pequeños y crecer, tanto espiritualmente como persona.

Estos días nos lanzaron una invitación: ¿Quieres seguir a Jesús como los primeros cristianos?, el seguirlo obviamente es un gran compromiso, pero con la ayuda del viejo lobo de mar y nuestra estrella de la mar, espero lograrlo, para ser así comunidad.

Por Gabriela Granadino (precomunidad Colegio Champagnat)


Mi experiencia “En el muelle”

Es curioso cuando estás parado en un punto en donde te das media vuelta y has recorrido un camino de 3 años y caes en cuenta que ha pasado todo ese tiempo y ha llegado el momento que termina todo. La expresión que ocupaba el H. Alejandro…”Ahora, en este día, todos ustedes que están dentro de una carabela se bajan de esta, se sientan en el muelle y ven el horizonte en el océano”. Es una experiencia para celebrar, sí, puede ser difícil decir adiós a personas que nos estuvieron acompañando durante 3 años, pero la amistad ahí está y es donde giraba nuestra vida con ellos, es un motivo de celebrar que pudimos culminar esta primera etapa del movimiento y estamos tirando a una apuesta para poder formar parte de una comunidad Remar. Dicho esto, dejo una frase que me ha gustado bastante y me ha llegado bastante para este retiro: “La entrega y la confianza han de ser absolutas; pero siempre uno trata, aún sin saberlo ni darse cuenta, de proteger la propia apuesta”. Creo que además de ser un motivo de celebración, fue un momento para dar gracias a esas personas que estuvieron con nosotros durante todo este tiempo pero sobre todo un motivo para apostar por una vida que nosotros como grupo queramos seguir. Un día no alcanza para cosechar por completo 3 años de camino con mi carabela, pero los invitaría a estar con nosotros un día para que sepan la clase de personas que somos.

Medardo Escobar (precomunidad Liceo Salvadoreño)